En los días de fiesta en Trasona, el menú que se preparaba era, de primero sopa de cocido, arroz a la asturiana o fabada
De segundo plato se hacía carne asada o en rollo, pito de caleya o conejo guisado.
Los postres siempre eran caseros y su componente principal era la leche, bien con un arroz con leche, leche presa o brazo de gitano.
En los cumpleaños se preparaban unas tartas hechas con capas de galletas remojadas alternando una capa de crema y otra de chocolate, la última tenía que ser de chocolate, decorda con merengue y encima se colocaban cerillas grandes que hacían la función de velas.